Dando pecho

Lilypie Breastfeeding tickers

jueves, 24 de febrero de 2011

De excursión por la cama grande

Hay muchos sitios donde dormir cuando eres bebé, puede ser un cuco-moisés, el cochecito, la cuna grande, cualquier otro sitio donde tengas sueño...  El mejor de todos es en brazos de mamá, pero para pasar la noche es mejor aún la cama grande de papá y mamá. (Porque mamá se cansa y no puede tenerla cogida 6 horas seguidas).

En un principio Adriana dormía en el cuco, que trasladábamos por toda la casa, pero como nació por cesárea la verdad es que sobretodo por la noche, era bastante doloroso incorporarse de la cama, inclinarse sobre el cuco, volver a levantarse y tumbarse en la cama con la niña en brazos. En serio, es terrible. Así que Josu tenía que cogerla por la noche, saltando por encima de mí y haciendo cabriolas para no caerse.

Al final vimos que la cuna grande, que ya habíamos comprado, tenía el colchón a la misma altura que el colchón de nuestra cama, y además, por el tipo de cuna que es, se le puede soltar un lateral sin que se desmonte. El resultado es que tenemos una cuna sidecar, que nos da mucha tranquilidad y sobretodo a mí,  comodidad. Si tiene hambre sólo tengo que alargar el brazo y traerla a la cama conmigo, si se le cae el chupete alargo el brazo y lo busco sin moverme, si quiero ver cómo duerme sólo tengo que girarme en la cama.

Creo que es la mejor idea que hemos tenido. Os lo recomiendo a todas. Si la cuna no coincide con el colchón se coge el taladro y listo. A ver si saco una foto de la habitación y os lo enseño.

A lo que iba con lo de explorar la cama grande. Resulta que como los colchones coinciden, algunos días estoy viendo que, como se mueve como un gusanito, se acerca más a mi y se queda muy cerquita, a mi me da miedo aplastarla y me muevo para el otro lado. Entonces ella se junta más y yo me vuelvo a mover. Así acabamos de excursión por todos los rincones de la cama, yo escapando y ella persiguiéndome.

Otras veces, depende de qué pecho le toque comer, directamente la dejo en la cama, ente nosotros dos. Josu (que es muy espabilau) casualmente se gira para el otro lado, por si la niña llora. Ella le pellizca la espalda (¡pero qué niña más lista!) y se gira hacia mi lado, y comienza de nuevo la persecución. Resultado: no es la primera mañana que amanezco dentro de la cuna. Por cierto, es bastante cómoda y tener encima de la cabeza un móvil con animalitos que giran tiene su encanto.







viernes, 18 de febrero de 2011

El sonido más bonito del mundo

Algunas veces me han preguntado si Adriana tiene la carita como me la imaginaba. La verdad es que no me imaginaba su carita, no había pensado en ello. En lo que tampoco había pensado es en su voz.

La verdad es que al principio sólo oyes su voz con el llanto, y cada 2-3 semanas le ha ido cambiando la forma de llorar, aunque siempre la hemos reconocido. Evidentemente en casa es la única bebé, pero cuando estuvo malita en el hospital había otros, y aunque nos mandaran salir de la sala sabíamos si la que lloraba era ella.

Según ha ido pasando el tiempo hemos oído sus primeros gorgoritos, que han pasado a ser sus primeras respuestas: "¿Quién es la más pelona?" Y ella contesta. Pues ahora ya no son sólo respuestas, son auténticas conversaciones bastante largas, en las que me cuenta sus cositas y yo le cuento las mías. Cuando alguna palabrita es difícil me mira cómo la digo yo e intenta imitarme.

También ha empezado a reirse. Primero empezó a parecer que sonreía, luego sonreía con la boca bien abierta y sacando la lengua, después ha empezado a reirse un poquito. Nos faltan las carcajadas.

Josu dice que me enredo en un bucle: "Eres la más bonita; sííí, la más bonita, princesa linda, la más linda, mi princesa, bonita..." Y también dice que ella habla y que soy yo quien balbucea. Yo creo que es envidia, porque sus secretitos me los cuenta sólo a mi.